Sonría, ya no lo quiero.

Por medio de la presente, le comunico a usted la agradable noticia de que ya no lo quiero,
adjunto además una serie de eventos, hechos o frases (de usted, claro está) que dieron paso a este agradable suceso,
los describo a continuación para desarrollo de la misiva:

1. Te olvidaste de sentir. Te olvidaste que yo sentía.
2. Te perfeccionaste en el arte de mentir. (yo en el arte de fingir que te creía)
3. Yo empecé a realizar cosas que tú nunca harías por mí.
4. Te olvidaste que fui yo la que estuvo para ti.
5. Me hiciste creer que no era interesante.
6. Me viste llorar y no hiciste nada para que yo cesara.
7. Dejaste que otros se burlen de mí.
8. 'Es tu problema si te pones triste...'

Disculpe usted pero puedo hacer una lista de 50 cosas (quizá más), y no quiero hacerle perder el tiempo,
ya los dos lo perdimos bastante. El tiempo digo, lo aclaro, porque también perdimos el deseo de leernos y eso.
Pero esta carta es feliz, sin desviarnos por favor.
Prosigo.

Bueno, descubrí que tiene razón señor, que siempre tuvo razón señor: siempre fue mi problema ponerme triste.
Pero tengo una excusa para eso: odio estar enojada. Una excusa pésima, pero así lo pensaba.
Pero luego reaccioné, y ponerse mal es trampa. Ponerme mal no iba a lograr que usted señor me quiera,
 ponerme mal no iba a lograr nada, nada bueno.

¿Sabe usted cuál fue la solución para tan lindo desenlace como este?
Se va a reír. Lo sé, pero debo decírselo: hartarme. Oiga, uno se harta de estar triste, de las burlas, de callar.
Es cansado.
Eso de la 'aceptación' es bullshit, disculpe usted la expresión, pero es que yo siempre lo acepté, siempre, se lo juro.
Lo que no quería era estar bien, al parecer.
Además no me gusta cargar con la amargura de nadie. Me imaginaba las veces que usted quizá en el fondo se sentía responsable de mi tristeza.
(quizá me equivoco y nunca le prestó mayor atención) de todas formas, no me gusta que nadie sea responsable de ningún sentimiento que no me haga sonreír.
Me harté de que quizá usted piense que controlaba lo que yo sentía, cosa que no voy a negar: ocurría.

¿Qué por qué le escribo esto?
Dos razones.
1. Creo que usted tanto como yo deseaba que yo 'siga mi vida' y 'lo supere'. (tomo sus palabras, disculpe)
2. Hace mucho que no hacía una carta.

Un día me levanté, y recordé cada cosa por las cuales debería odiarlo a usted y nunca en mi vida volver hablarle, y en lugar de pensar en
cosas tristes, malas y feas (como lo solía hacer), me decidí por pensar que necesitaba encargarme de mi vida (cosa a la que ya usted no está vinculado)
fue un resta simple. Ya no me necesita más y quiero que si lo vuelvo a ver usted sonría, porque señor, yo ya no lo quiero.
Y sé que eso lo hace feliz.


Saludos cordiales.

JustinPincayP. 

Comentarios

  1. 50 cosas, 50 Shades of Grey. Coincidencia? No lo creo!

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  2. Estoy sonriendo de una manera jodida y enfermiza, y como sabes no es ´facil decir 'te quise', porque no llegamos (quizá) a la impávida mirada del deseo. Hay un aura en ti. Un engaño que he consensuado con mis ojos mientras te veía y te escribí. Nos vimos pero no nos vimos. Quizá eres más fantástica conociéndote, y he sido yo el idiota de siempre. Quizá.

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  3. Si pudieras abrir tus ojos y ver mas allá de la amistad, si pudieras sentir los latidos de mi corazón cuando estoy a tu lado, si tan solo por un segundo me vieras con los ojos de tu alma te darías cuenta que soy yo.....

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  4. Hola, soy el Chipi, escribes bonito. Besos.

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  5. Lo he leído con un nudo en la garganta :') hermoso

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  6. Aunq rayando en la ironia, fantastico... tantito tarde lo leo pero esta genial, felicidades por escribir asi...

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  7. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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