Corazón completo, gracias.


El 08 de marzo mientras estaba en cobertura, recibo el mensaje más desequilibrante: ‘Detuvieron a Tais en Miami’. A partir de ese día hasta el 22 de mayo, que mis padres la recibieron en el aeropuerto de Quito, todo fue gris. Pero este post no es para contarles con lujos de detalles ese proceso tan doloroso que mi familia tuvo que atravesar. Es para decirles gracias a quienes digital y personalmente me acompañaron. Escribo esto mientras veo a mi hermana acostada en el mueble viendo Supernatural y me siento en paz. Tengo deudas y mil pendientes en el trabajo pero siento paz de verla ahí con su pelo desordenado, sus brackets, y su adolescencia a flor de piel. Lloré muy poco aunque no lo crean pero las veces que lo hice fueron suficientes para recargarme para el día siguiente. Todos los días recibía mensajes por twitter o instagram, donde me preguntaban avances y me daban palabras de aliento. ‘Ten la certeza que todo regresa a su lugar’ me dijo @belenccia un día antes que me anunciaran la fecha de regreso de Tais. Todos esos detalles de gente que no me conoce me hizo sentir respaldada, algo que necesitaba demasiado porque mis padres y Tais confiaban en mí. Soy creyente del poder de la oración y cuando las personas me decían que estaban orando por mi hermana, no podía de la emoción. Fue el mejor regalo. Así que gracias. Gracias a mis padres, que en su dolor, me permitieron liderar el conflicto. Gracias a mis amigos que me preguntaban por Tais y me ofrecían su ayuda. Gracias a mis mejores amigas que me escuchaban a diario. Gracias a mis tías y primos. Gracias a mi equipo de trabajo que por videoconferencia aguantaron el único llanto –gigante- -se pusieron a chillar conmigo- que me pegué por el tema. A mis compañeros de la oficina que sabían lo que estaba pasando y me abrazaban de la nada cuando me veían con la mirada perdida. Gracias a la gente de twitter que todos los días estuvieron pendientes, pero especialmente a Silvyazul, Claudia Hidalgo y LaChicho. Gracias a ti Jamie, que te quedaste conmigo emocionalmente las últimas semanas y te convertiste en mi amigo. Gracias Maureen Fabre, eres la mejor, no tengo palabras para agradecerte todo el apoyo emocional que me diste hasta el día que llegó Tais. Gracias Anita Contreras por siempre estar con nosotros y ayudarme con todo.  Gracias Roos porque intentaste hacerme reír cuando recibía malas noticias (más tiempo) incluso cuando te aseguraba que estaba bien y que lo podía manejar. Gracias Gabriela Zambrano por llamarme y escribirme a recordarme que contaba con tu apoyo. Gracias Andreita por salir a hablar conmigo en la hora del almuerzo para que pueda desahogarme. Gracias Gaby Valarezo por analizar conmigo, todos los días,  todo lo que estaba pasando. Gracias Pam. Gracias Willy. Gracias Greg. Gracias Dani V. Garcias Andrés T. Gracias Melibon. Gracias Negra. Gracias a los que me ofrecieron su casa en Miami, a los que se ofrecieron visitar a Tais, y a los que ofrecieron el alcohol para la celebración. Gracias a las 90 personas que me escribieron para ofrecerme mil alternativas de ayuda. Gracias a todos los que me escribieron una vez, y me abrazaron para recordarme que no estaba sola.  Pero sobre todo, Gracias Tais, gracias mi amor porque sin tu tranquilidad y tu temple jamás hubiese logrado mantenerme a flote. Gracias vida por la lección que vivimos todos. Gracias Dios por no dejarnos solos. 

Comentarios

Entradas populares